La música entra por el o̶í̶d̶o̶ juicio
Seguramente más de una vez te ha pasado que hay tanta gente compartiendo una canción o usándola en cada contenido que suben, que terminas buscando quién es el artista o por qué es tan popular ese tema.
La música mueve y conecta a mucha gente con intereses y sentimientos en común. Y cuando esa gente está tan comprometida con lo que está consumiendo, muchas veces logra persuadir a otras personas de darle play al mismo contenido. Y luego, esas personas replican el comportamiento con sus círculos sociales. Bueno, pues hay dos fenómenos psicológicos que explican este comportamiento persuasivo.
Existe un fenómeno conocido como psicología de las masas, que hace referencia a aquel individuo que es influido por un gran número de personas a las que está ligado por algo y forma parte de esa masa por un determinado tiempo y con un determinado fin.
Pero primero, ¿qué es la masa? Básicamente se trata de un ente donde existe un contagio de sentimientos y actos, sustituyendo el interés personal por el del grupo social.
"El Yo es sustituido por el Nosotros"
Gustave Le Bon
Y siguiendo con ese impacto colectivo, también existe el fenómeno conocido como social proof, en el cual, el individuo adopta el comportamiento de un colectivo, asumiendo que éste tiene un mayor conocimiento o dominio de la situación. Es decir, si muchas personas lo están consumiendo, debe ser bueno, ¿no?
¿Y qué tiene que ver toda esta data con la música?
Básicamente demuestra la importancia de construir una comunidad que conecte con nuestro proyecto y apueste por él. Y que seamos tan increíbles para esa comunidad, que poco a poco se genere un efecto bola de nieve con el resto de la gente.
De hecho, un estudio sugiere que nuestras preferencias musicales están mayormente influenciadas por nuestros amigos, de ahí la importancia de que la gente hable de nosotros con su círculo social. Aunque también, en las redes sociales constantemente nos dejamos guiar por lo que un colectivo está consumiendo o replicando en sus perfiles.
Pensemos en TikTok: los contenidos musicales que se viralizan muchas veces repercuten en el engagement del artista, porque se pone en marcha la psicología de masas y el social proof. Es decir: me voy a sumar al trend porque quiero ser y sentirme parte de un colectivo. Si este contenido es viral, entonces lo voy a replicar. Si este artista suena en todos los videos, es porque su música es buena y necesito consumirla para estar en onda.
Probablemente no en todas las personas influye de la misma manera, ni impacta positivamente (debido a la formación musical, al contexto social, etc.), pero el hecho de que tanta gente esté hablando sobre lo mismo, nos causará curiosidad y nos motivará a buscar a ese artista o esa canción… aunque sea sólo para poder criticarla.
Una prueba de este fenómeno…
Hace unos años (en 2007 para ser exactos) Joshua Bell, un músico de renombre internacional, tocó en una estación de metro como parte de un experimento social para probar la importancia del contexto, la percepción y las prioridades para atraer el interés del público... incluso cuando eres uno de los mejores violinistas contemporáneos.
El resultado de esta prueba fue que sólo un par de personas le prestaron atención durante los 40 minutos que estuvo tocando. Aún para un violinista de renombre mundial, el hecho de no contar en ese momento con una insignia o algo/alguien que respaldara su trayectoria, evitó que la gente se detuviera a escuchar su música. Imagina lo que tus redes sociales podrían decir de ti a quienes visitan tu perfil.
En 2014, Joshua Bell volvió a la estación de metro para otro concierto gratuito, pero esta vez logró reunir a cientos de personas. ¿Cuál fue la diferencia? Bueno, la gente se reunió desde dos horas antes del concierto porque les dijeron que tocaría un violinista de fama internacional. Es decir, se reunieron porque, para el resto del mundo, ese violinista valía la pena. Si el mundo avala su talento y lo consume, yo también quiero ser parte del fenómeno.
Ahora, ¿cómo usar el social proof a mi favor?
Haz que la gente hable de ti y eventualmente ese eco llegará a más personas.
Motiva a tu audiencia a ser seguidores activos en tus redes sociales y plataformas. Invítalos a comentar tus publicaciones, videos y a compartir tu música y diversos contenidos en sus redes sociales.
Una práctica útil y funcional, es crear contenidos y abordar temas que sean de interés social. Es decir, promover tu música es importante, pero hacer que la gente se identifique y conecte con ella es indispensable para crear un impacto social de mayor magnitud.
Aunque paradójicamente, también es importante buscar ese tinte único dentro de lo socialmente establecido, aquel punto de encuentro que permite a los seres sociales coincidir en ideología, gustos y experiencias.
Toda masa empezó siendo minoría.
Recuérdalo siempre y no limites tus acciones a tu número de followers. No importa qué tan pequeña sea tu comunidad, si está completamente comprometida con tu proyecto (y si cuentas con una buena estrategia de marketing), poco a poco esa bola de nieve irá creciendo y se pondrá en marcha la psicología de las masas y el social proof, generando un impacto mayor de tu mensaje.
La música entra por el oído, pero el juicio que la gente hace sobre ella también influye en los nuevos usuarios. Haz que la masa apueste por ti, haz que el social proof sea tu carta de presentación. Construye comunidad. 💛