La vida es un antes y un después de la planificación.

Recientemente tuve un live con Connie Fuentes —tour y personal manager con más de 10 años de experiencia—, donde hablamos sobre la importancia de planificar cada una de nuestras actividades; tanto las laborales, como las personales.

En el caso particular de la industria musical, hemos detectado que la mayoría de errores que comete un artista, son producto de una mala o nula organización, pues el proyecto navega a la deriva sin un mapa o una brújula a la cual recurrir en caso de emergencia.

Como dijo Connie, planificar nos da paz porque aclara nuestro panorama y nos ubica en la realidad para conocer con qué recursos contamos y cómo los usaremos eficazmente para seguir avanzando en el camino hacia nuestra meta.

Entonces, ¿cómo planificar?

Connie recomienda dividir un objetivo en micro objetivos, de esta manera podremos enfocarnos en una cosa a la vez.

Como ejemplo, si nuestro objetivo es tocar en el Vive Latino en 2025, nuestros micro objetivos deben ser pequeñas acciones diarias, semanales o mensuales, que nos permitan avanzar un paso a la vez hacia ese objetivo principal.

Es importante aclarar que tu checklist de micro objetivos o microtareas debe ser específica y concreta. Las to do list enormes solo asustan y disminuyen nuestra productividad y rendimiento.

Entonces, una vez identificadas esas subtareas, ponles fecha y hora para asegurarte de cumplirlas. Todo con moderación, pues la hiperproductividad a veces genera desequilibrios.

Ahí radica la importancia de establecer prioridades. Puedes hacerlo mediante este método:

Toda planificación, comienza con investigación

Como lo hemos hablado en diferentes posts y notas, para planear una estrategia de marketing es sumamente importante conocer el público al cual nos dirigimos, pues la conversación y la planificación debe ser diferente para cada una de las plataformas en las que distribuyes tu música. No todas las estrategias funcionan con todos los públicos, ni en todas las redes sociales. Considera todos los pros y contras antes de ejecutar tus campañas.

Toma en serio tu proyecto

Aunque cuentes con un equipo de trabajo que te ayude a gestionar tu proyecto, en la dura realidad, tu proyecto solo te importa a ti. Pero no lo tomes como algo negativo, úsalo para ser consciente de que el único responsable de que las cosas sucedan como quieres que sucedan, eres tú. Y por ende, necesitas ser un miembro activo en cada eslabón de la cadena.

El plan B

Dentro de la planificación, hay que dejar espacio para todo lo que podría salir mal.

El primer paso es entender que no eres perfecto, ni tienes el control de todo. O juegas con eso y planificas, o vives estresado.

Por eso siempre hay que contar con un plan B y entender que a veces es necesario tomar otro camino. Por suerte, la planificación permite anticiparse a algunos problemas y contar con ese plan de crisis. Analiza todos los posibles escenarios y detecta las amenazas.

¿Qué herramientas puedo usar para planificar?

Además de Google Calendar (la favorita de Connie), hay mil aplicaciones que te permiten organizarte y coordinarte con tu equipo de trabajo para cumplir con sus objetivos en el tiempo establecido. 

Conócelas, pero sobre todo, úsalas para saber cuál se adapta mejor a tu proyecto. En liliancazares.com/toolbox encontrarás un manual con más de 120 herramientas para tu día a día. 

A veces lo más importante de la planificación es establecer límites y considerar un espacio para nuestra realización personal. Nuestro proyecto musical es una prioridad, pero nosotros lo somos más.  Estas herramientas pueden ayudarte a optimizar tu tiempo y energía para enfocarla en otros asuntos más arriba en tu lista de prioridades.

La planificación es un terreno que te permite dar pasos firmes hacia tus objetivos, con el menor margen de error.

Como dijo Benjamin Franklin:

“Al no planificar, se está planificando para fracasar”

Planifica, trabaja y confía. Siempre habrá un plan B. 💛

Si te interesa conocer más del tema, puedes ver el Live con Connie en mi perfil de Instagram.