Buenas prácticas para cobrar tus regalías

Los temas legales son un pilar fundamental en la vida de un músico, pero lamentablemente no siempre se tiene al alcance la información suficiente, ni los recursos necesarios para contratar a un especialista que atienda esta área de nuestro proyecto por nosotros.

Sin embargo, hay cosas básicas que no podemos perder de vista para asegurar la legalidad de nuestro proyecto y evitar problemas a futuro. Es por eso que Edgar Burciaga, abogado y consultor, especializado en Music Business, nos comparte algunos tips para cobrar tus regalías, leyes y algunas otras buenas prácticas en la gestión legal de un artista.

Edgar ha asesorado a músicos, agencias de management, disqueras y editoras independientes desde hace 15 años, así que no pudimos tener un mejor invitado para compartirnos información tan valiosa.

¿Cómo se cobran las regalías? 

Un tema al que hay que poner especial atención, es al cobro y pago de regalías, pues si tenemos esta área en orden, evitaremos conflictos legales con colegas que participaron en nuestro proyecto musical, repartiendo las ganancias de manera justa (según lo que hayan establecido en su contrato),

El primer paso es entender que hay 3 tipos de regalías: regalías de la composición, del máster y del video. Quien controla estas regalías así como el registro del nombre, tiene el control total del proyecto… y volvemos a hacer énfasis en la importancia de un papelito que avale estas decisiones.

Contrato de composición

Cada vez que surge una composición o colaboración, es importante definir quién controlará los derechos. Este contrato deberá incluir a todos los involucrados, por ejemplo: productor, editora, coautor(es), entre otros.

Derechos del máster 

Cuando se trata del máster, debe crearse un contrato entre el artista y el productor musical, en ese contrato debe especificarse que el artista contrató los servicios del productor y por ende los derechos del máster pertenecen al artista.

Contrato de video

En el caso de una producción audiovisual, se firma un contrato entre el artista y el director del video; en él se especifica que todos los derechos del video pertenecen al artista o, en dado caso, al productor ejecutivo.

Entonces, es importante que el artista cuente con 3 títulos: 

-El título de registro de la composición.

-El título de propiedad del máster

-El título de registro del video

Y lo más importante:

Por obvio que parezca, otro título importante es el del nombre artístico. Aunque no lo creas, hay proyectos que después de haber lanzado música, se enfrentan a problemas legales porque el nombre que utilizaron le pertenece a alguien más. Así que para evitar este conflicto, no olvides registrar tu nombre artístico, pues éste es otro de los activos más relevantes en tu proyecto.

Evita que alguien más utilice tu identidad o, peor aún, la música en la que tanto tiempo y recursos has invertido.

En la industria musical las cosas no siempre son justas ni iguales para todos, y peor aún si no cuentas con un contrato donde se establezca específicamente qué porcentaje le corresponde a cada miembro de tu proyecto. Como dice Edgar:

“Hay talento, sólo falta estructura”

-Edgar Burciaga

Cualquier negocio necesita una estructura legal, actualizada, con visión. Cuando todo eso está en orden, es más probable que alguien apueste por nuestro proyecto y sobre todo, que a cada área le toque lo que le corresponde, de manera justa.

Si quieres saber más sobre el tema, puedes ver la charla completa en mi cuenta de Instagram (@lilianrcazares), así como seguir a Edgar Burciaga (@edgarburciaga) para no perderte los tips que constantemente comparte sobre los temas legales en la industria musical.

Visita su página web: www.edgarburciaga.com